Conociendo a tu gato: 3 comportamientos felinos comunes explicados

Conociendo a tu gato: 3 comportamientos felinos comunes explicados

Los gatos son compañeros fascinantes y misteriosos.

A diferencia de los perros, los felinos son más independientes, cariñosos a su manera y suelen comunicarse de formas que pueden dejar a sus tutores bastante confundidos.

Si alguna vez te has preguntado: “¿Por qué mi gato maúlla tanto?” o “¿Por qué me muerde cuando lo acaricio?”, no estás solo.
En este artículo respondemos tres de las preguntas más comunes entre los tutores de gatos. Vamos a descubrir qué es lo que tu amigo peludo realmente intenta decirte… y cómo puedes responder.

¿Por qué mi gato maúlla tanto?

El maullido es la forma vocal más común con la que los gatos se comunican. Generalmente lo usan para expresar una necesidad: comida, juego o cambio de arena. Usualmente, cuando esa necesidad se satisface, el maullido se detiene.

El carácter y la raza también influyen: algunos gatos son naturalmente más vocales que otros, mientras que algunos son mucho más silenciosos. Esto debe tenerse en cuenta al evaluar el comportamiento de tu gato.

Si ya descartaste todas estas razones y el maullido continúa, podría ser una señal de malestar, estrés o incluso alguna enfermedad. En ese caso, lo mejor es agendar una visita al veterinario para descartar problemas de salud.

¿Por qué mi gato muerde cuando lo acaricio?

Una situación muy común: estás dándole mimos a tu gato, todo va bien… y de repente, ¡te muerde! Esto es más normal de lo que parece y suele tratarse de una cuestión de comunicación.

Pequeños mordisqueos acompañados de ronroneos, lamidos o mostrar la panza suelen ser signos de afecto y una invitación a seguir.
Por otro lado, si notas que sus pupilas se dilatan, el pelo se eriza o emite un bufido, significa que su “umbral de caricias” está por llegar al límite. Son señales importantes a las que hay que prestar atención; reconocerlas a tiempo te ayudará a detenerte antes de que tu gato sienta la necesidad de morder.

Para evitar que te muerda, simplemente deja de acariciarlo con suavidad y dale su espacio. Y algo clave: nunca lo regañes, ya que esto daña la confianza y aumenta su estrés.

¿Por qué mi gato hace sus necesidades fuera del arenero?

Encontrar una “sorpresa” fuera de la caja de arena puede ser muy frustrante. Nadie disfruta del olor fuerte de la orina o de tener que limpiar después. Pero recuerda: esto suele ser la forma en que tu gato te comunica que algo no está bien.
Algunas de las causas más comunes (y sus soluciones simples) son:
  • Caja de arena sucia: los gatos son extremadamente limpios, y una caja sucia simplemente les resulta inaceptable. Limpiarla a diario es esencial para mantener un ambiente higiénico y evitar accidentes en otros lugares de la casa.
     
  • Ubicación inadecuada: si la caja está en un sitio difícil de acceder o se cambia constantemente de lugar, el gato puede dejar de usarla. Lo ideal es mantenerla en una zona fija, lejos del ruido y del tránsito frecuente, pero accesible para él.
     
  • Varios gatos en casa: a los gatos no les gusta compartir su caja. La regla general es tener una caja por gato más una adicional (por ejemplo, para 2 gatos, deben haber 3 cajas disponibles).
     
Como ves, muchos de estos problemas se pueden resolver con un poco de limpieza y organización.
Si después de aplicar estas soluciones tu gato sigue evitando la caja, podría tratarse de un problema médico, como infecciones urinarias (UTI) o cálculos en la vejiga. En esos casos, lo mejor es consultar con tu veterinario para descartar cualquier causa de salud.

Si tu mascota presenta problemas urinarios, pídele a tu veterinario que te recomiende la dieta más adecuada de Farmina N&D o VetLife. Junto con la dieta específica para tu gato, podrás acceder a nuestro Servicio de Consultoría Gratuito.


Reflexión final

Comprender el comportamiento de tu gato es clave para construir una relación más feliz y libre de estrés con tu compañero peludo. Desde los maullidos excesivos hasta las mordidas durante las caricias o los problemas con la caja de arena, la mayoría de las situaciones se pueden resolver con observación, paciencia y cariño.